El dropshipping permite vender sin tener ningún almacén y, por tanto, poner en marcha una actividad comercial en poco tiempo.

¿Cómo funciona? ¿Cuáles son los mejores proveedores? ¿Cómo empezar?

En esta guía analizamos todos los aspectos y pasos que hay que dar para empezar a vender online sin preocuparse del inventario.

Qué es y como funciona el dropshipping

El dropshipping es un modelo de venta online desarrollado por el sector e-commerce. Llegó a España a principios del año 2000, cuando el comercio online iniciaba su tímida escalada con el entonces célebre sitio de subastas online eBay.

Si en aquella época se configuraba como un sistema de venta tosco y engorroso, hoy en día el dropshipping ha adoptado una forma definitivamente más armónica, que permite vender con herramientas profesionales y a través de múltiples canales.

El 33 % de los negocios online adopta el modelo de venta dropshipping.

¿Cómo funciona el dropshipping?

El vendedor elige su proveedor, los productos que quiere vender y prepara una tienda online (profundizamos en los diversos pasos en la sección ¿Cómo empezar?).

Cuando alguien realiza una adquisición en la tienda, el vendedor cobra y efectúa a su vez un pedido en la plataforma del mayorista, proporcionando los datos del cliente.

El mayorista expide el producto directamente al cliente.

Imagen: Mobile Transaction

1. El cliente compra en la tienda online al precio establecido por el vendedor – 2. El vendedor hace un pedido en el sitio del proveedor – 3. El proveedor expide los productos directamente al cliente. 

Por tanto, es el vendedor el que recibe el pago del cliente y, con esa suma ya cobrada, procede a realizar el pedido al proveedor.

El vendedor no entra nunca en posesión de los artículos vendidos ni tiene que comprarlos anticipadamente.

¿Cuánto se gana?

El beneficio es la diferencia entre el coste de comprarlo al mayorista y el precio de venta, decidido por el vendedor.

Ejemplo práctico

  • El proveedor ofrece un par de zapatos a 150 euros.
  • En mi tienda elijo venderlos a 200 euros. Un cliente los compra, paga la cantidad, yo cobro.
  • En este punto, envío el pedido al proveedor y pago 150 euros.
  • En mis bolsillos queda la diferencia entre el coste del producto y el precio de venta; es decir, 50 euros.

Este modelo de ecommerce permite iniciar con un presupuesto limitado,  pero sobre todo con una inversión a bajo riesgo, ya que no se necesita tener existencias ni adquirir previamente los bienes a vender.

Dropshipping en España: ¿cuáles son los mejores proveedores?

Encontrar proveedores de dropshipping serios, fiables y en línea con nuestro proyecto ecommerce puede ser una tarea ardua. En la web no faltan opciones, pero no todas merecen la pena.

Partimos del hecho de que hay pocos dropshippers españoles y de que casi siempre se limitan a una categoría específica de bienes o servicios: las opciones entre las que elegir son escasas.

Recurrir a varios mayoristas es complicado, en primer lugar porque implica verificar la fiabilidad de cada uno de ellos y asegurarse de que la plataforma que se ofrece está a la altura y es compatible con nuestro negocio virtual.

Al principio, es aconsejable utilizar una solución más práctica y completa, y así tener a disposición un catálogo de productos amplio en el interior de una plataforma única y eficiente. Un sistema similar al que actualmente ofrecen servicios que toman la forma de simples apps integrables en los sitios web.

Oberlo con AliExpress

AliExpress es uno de los sitios ecommerce más famosos del mundo, competencia directa de Amazon.

En España, ha tenido un éxito moderado gracias a una amplia variedad de artículos, así como a precios competitivos. Ciertamente, en su página web se encuentra de todo (ropa y accesorios, electrónica e informática, joyas y relojes, manualidades, etc.), mayoristas incluidos.

Para acceder a la plataforma de los proveedores en AliExpress basta con instalar Oberlo en tu propia tienda online.

Imagen: Oberlo

Las fichas de los productos (descripciones, imágenes, informaciones), se transfieren a nuestra tienda en pocos instantes; el vendedor realiza una eventual personalización y, naturalmente, elige el precio de venta.

Hay un plan gratuito disponible para empezar a vender sin inversión; los planes más avanzados ofrecen funciones adicionales útiles para hacer crecer la actividad más rápidamente.

Modalyst

Modalyst es una plataforma dropship especializada en moda, ropa y accesorios.

Agrupa empresas europeas, americanas y asiáticas que ponen a disposición de los vendedores un inventario amplio que ofrecer a sus clientes.

En este caso, también es posible importar los productos elegidos directamente a la tienda y hacer algunos cambios (el precio lo elige libremente el vendedor) antes del lanzamiento.

Imagen: Shopify

Se confirma la posibilidad de iniciar a coste cero, con un plan gratis, para después pasar a una suscripción premium cuando sea necesario.

El servicio Private Label ofrece la personalización del packaging y de las etiquetas.

Printful

Printful es una opción interesante para los creativos, que tendrán la posibilidad de vender productos únicos con un diseño personalizado (ropa, artículos de regalo, accesorios, etc.).

El vendedor crea un diseño, selecciona los artículos en los que imprimir el diseño gráfico y lo ofrece en su tienda online. Solo una vez efectuada la venta se realiza el pedido en Printful, que lo prepara todo y lo expide directamente al cliente.

Imagen: Printful

No hay costes de inscripción ni abonos que pagar.

La asistencia está disponible 24/7 y las expediciones se realizan por todo el mundo desde la tienda más cercana al cliente.

Otros proveedores

Que AliExpress y las diversas apps que son conocidas constituyan las opciones más sencillas, no significa que no haya otros actores en juego. Estos son algunos mayoristas fiables con base en Europa:

Big Buy – mayorista y dropshipper español con stock en Europa. Hay diversas categorías de productos disponibles (electrónica e informática, telefonía, casa y jardín, perfumería y cosméticos, juegos y disfraces).

Puede integrarse en los ecommerce de Shopify y Prestashop. Además, ofrece la posibilidad de adquirir un negocio ya configurado en una de las dos plataformas: los precios son, no obstante, elevados (visita  BigBuy.eu).

BrandsDistribution – mayorista italiano que opera también fuera de Italia, especializado en ropa y accesorios. Las marcas con las que trata son de las más importantes, incluidas marcas de alta costura made in Italy, como Gucci, Dolce & Gabbana, Fendi o Armani, por nombrar algunas.

Es compatible con Amazon, eBay, PrestaShop y WooCommerce.

La mejor elección para el que quiera emprender con un comercio online en este sector. No obstante, por muy eficiente que sea el sistema adoptado por el dropshipper, las tarifas no resultan particularmente tentadoras para los neófitos de la venta online: 99 euros al mes o bien 990 al año (visita BrandsDistribution.com).

DMI – mayorista español con sede en Madrid que distribuye productos y accesorios tecnológicos como ordenadores, tablets o televisores, así como otros artículos relacionados con el deporte y el hogar (smartwatches, cámaras de vigilancia).

Ofrecen productos de fabricantes de renombre en el sector como LG, Samsung, Canon o Toshiba, y atención técnica y comercial personalizada.

Desafortunadamente, no cuenta con ningún plugin compatible con plataformas ecommerce como Shopify, Wix o Prestashop, por lo que puede resultar complicado gestionar las ventas y los pedidos. Por otro lado, dispone de un catálogo de productos en formato .csv.

DHGate – mayorista chino que tiene diferentes categorías de productos, que van desde ropa y zapatos, pasando por juguetes y joyas, hasta piezas de motos y artículos de protección como mascarillas.

Puedes importar la información relativa a los productos a tu tienda online con un plugin.

¿Cómo empezar?

Para empezar a vender en dropshipping se necesita en primer lugar una tienda online a la que añadir los productos.

Algunas plataformas permiten crearlo en poco tiempo, partiendo de modelos de sitios ecommerce personalizables (o empezando desde cero).

1. Crear la tienda online

Entre las plataformas más populares para la creación de tiendas online figuran Wix y Shopify.

Wix se adapta también a los principiantes, a quien no tenga experiencia en la creación de sitios web.

Se elige una plantilla pre-configurada y se personaliza a través del editor en modalidad drag and drop: se pueden añadir, mover y eliminar elementos gráficos con un gesto rápido con el ratón.

Imagen: Wix

Además de ser muy intuitiva, Wix es una de las plataformas más económicas para crear sitios ecommerce. Su plan Business Basic cuesta solo 17 € al mes y es más que suficiente para empezar.

Gracias a Wix Payments, los clientes de la tienda podrán pagar con tarjeta de crédito, de débito y de prepago, así como mediante otros métodos de pago.

Dropshipping con Wix: Modalyst, Printful

Shopify se especializa en el ecommerce, y se nota. Respecto a la competencia que acabamos de ver, ofrece herramientas más completas y funcionalidades más amplias, pero al mismo tiempo le falta el carácter intuitivo que caracteriza a Wix.

La creación del negocio online se lleva a cabo con un live editor situado en la parte izquierda de la pantalla, mientras que en la derecha se observan en tiempo real los cambios en curso. Se puede partir de una plantilla predefinida y personalizarla.

Imagen: Shopify

Los que sean nuevos en esto, tendrán que familiarizarse con sus herramientas, pero una vez superada la fase inicial se percibe claramente su superioridad.

Por razones evidentes, Shopify tiene un coste más elevado que otras plataformas: se parte de 29 $ al mes por el plan Basic. Se puede probar gratuitamente durante 90 días.

Dropshipping con Shopify: Oberlo, Modalyst, Printful, Big Buy

2. Instalar la app para el dropshipping

Una vez personalizado el sitio ecommerce, se puede pasar a equipar la tienda online con los productos a vender.

Las plataformas como Wix y Shopify dan acceso a un app store interno, en el cual se puede navegar entre las aplicaciones disponibles e instalarlas con un simple clic.

Buscamos la app elegida para el dropshipping (además de las mencionadas en esta guía, encontraremos muchas otras, pero hay que asegurarse de que son fiables) y hacemos clic en Instala o Añade.

En este punto, podremos acceder a través del menú y empezar a explorar los productos de los proveedores. Se pueden importar las fotos e informaciones a la tienda en pocos instantes.

3. La elección del precio

El beneficio es la diferencia entre el coste del producto y el precio de venta, el cual es establecido por el vendedor libremente. Sin embargo, la codicia rompe el saco, y precios muy elevados (aunque también demasiado bajos) tienen una influencia negativa en las ventas potenciales.

Hay que analizar cuál es el precio justo teniendo en cuenta también factores secundarios; por ejemplo, la expedición, que se puede poner como un gasto separado o bien incluirlo “gratuitamente” según las circunstancias (número de productos adquiridos, compra completa superior a…, etc.).

Naturalmente, esta valoración debe realizarse en base a datos concretos, que podremos ver en la plataforma para el drop ship. No obstante, por ahora podemos ir familiarizándonos con algunas de las estrategias tarifarias:

  • Incremento fijo en el coste
  • Incremente en el coste dividido por niveles
  • Precio sugerido por el proveedor

El incremento fijo (Fixed markup on cost o, abreviado, FMOC) implica añadir un margen fijo sobre el coste del producto, que normalmente se fija porcentualmente. Es una estrategia práctica porque al margen de las valoraciones iniciales, permite fijar rápidamente el precio de un nuevo producto pero, como se puede intuir, no siempre ofrece los mejores resultados.

El incremento dividido por niveles (Tiered markup on cost) es similar al anterior, pero implica establecer diversos márgenes según el coste del producto. Generalmente, se utiliza para maximizar el beneficio del producto a bajo coste y mantener precios razonables en productos de calidad.

El precio sugerido por el productor (Manufacturer’s suggested retail price o, abreviado, MSRP) puede que sea la mejor estrategia tarifaria a adoptar por vendedores principiantes y es, en efecto, una de las más utilizadas por negocios online pequeños. Consiste en empezar sin darle demasiadas vueltas e ir probando con calma varias estrategias sobre los precios. Además, abre la puerta a descuentos sobre el precio “oficial” del producto.

4. Promocionar el negocio

La promoción puede hacerse con métodos gratuitos o bien pagando por poner publicidad en los motores de búsqueda y las redes sociales.

Se puede empezar creando una Página Empresarial en Facebook, para utilizarla como Escaparate para exponer los productos a la venta.

Además de montar un sitio e-commerce, Shopify ofrece herramientas para vender directamente a través de Facebook, Instagram, Pinterest, etc. De esta forma, tendremos a disposición más canales de venta, todos asociados y gestionados desde una única plataforma.

Publicar regularmente mensajes, imágenes, testimonios y comentarios de los consumidores es una forma estupenda de despertar el interés de los que están suscritos y de hacerles partícipes.

Sin embargo, para obtener resultados en poco tiempo es necesario un empujón: los anuncios publicitarios.

Se pueden crear campañas publicitarias en Facebook, Instagram y Google dirigidas a un target específico que pueda tener interés en nuestros productos.

El coste de la publicidad en las redes mencionadas no es necesariamente alto: podemos establecer un presupuesto máximo y seleccionar el modelo cost-per-clic (CPC), gracias al cual se paga por cada clic conseguido por el anuncio.

La publicidad de pago es, de hecho, indispensable cuando se emprende una nueva actividad y no se dispone de una fuerte presencia en las redes.

Pros y Contras

Inversión a bajo riesgo

Inicio de la actividad en poco tiempo

No hace falta tener un almacén

No se realizan expediciones

Márgenes de beneficio moderados

Atención al cliente complicada

Competencia elevada