¿Te ha generado inconvenientes alguna vez tu IBAN extranjero? En España, como en buena parte de la Unión Europea, la discriminación de IBAN sigue siendo un problema con el que tienen lidiar, día a día, un sinfín de consumidores, profesionales y empresas.

Magali Van Bulck es Directora de Políticas y Campañas en Wise y fue una de las principales promotoras de Accept my IBAN (Acepta mi IBAN), una coalición de empresas fintech y neobancos formada en 2021 con el objetivo de combatir la discriminación IBAN en Europa.

Conversamos con Magali para comprender mejor cuál es el rol de la coalición que ayudó a formar, y para indagar en su visión de esta problemática en la actualidad, y a futuro.

¿Qué es la discriminación IBAN?

En los países SEPA, las entidades financieras utilizan un Número de Cuenta Bancaria Internacional (IBAN) normalizado, formado por un código de país de dos letras, seguido de los dígitos de control, el identificador bancario y el número de cuenta.

La discriminación de IBAN sucede cuando un consumidor, una empresa o una entidad pública, rechaza una cuenta bancaria SEPA, ya sea para procesar un pago, un cobro o una domiciliación, basándose únicamente en que el código de país del IBAN pertenece a otro país SEPA.

A pesar de que esta práctica es ilegal, como se expresa claramente en el apartado 9 del preámbulo del Reglamento UE 260/2012, es tristemente común en España, perpetrada a diario tanto por empresas privadas como por entidades públicas, comercios y profesionales. Así lo expresa Magali cuando le preguntamos al respecto:

«La discriminación de IBAN sigue siendo un gran problema para los consumidores y las empresas, a pesar de que hace 10 años que va en contra de la ley. No pueden pagar ni cobrar, muchas veces quedando desamparados. También es un problema de industria para las empresas fintech, que a menudo ofrecen un IBAN para toda la Unión Europea.»

El rol de Accept my IBAN

Como nos explica Magali, la discriminación de IBAN plantea un gran problema para las empresas fintech, particularmente para las que están dando sus primeros pasos más allá de las fronteras de sus países de origen:

«Combatir la prevalencia de la discriminación de IBAN y la falta de cumplimiento fuerza a las empresas fintech a dedicar una cantidad considerable de recursos a encontrar soluciones.»

Dos casos son representativos de esta situación en España: N26 y Revolut. Ambos neobancos llegaron al país, años atrás, ofreciendo cuentas bancarias altamente competitivas, con números de IBAN alemán y lituano respectivamente.

Sin embargo, tanto N26 como Revolut (muy recientemente) han pasado a ofrecer cuentas con IBAN español a sus usuarios españoles. ¿La razón? Si bien la posibilidad de integrar BIZUM es la más lógica (N26 ya lo hizo), se trata a su vez de una respuesta a la discriminación IBAN sufridas por sus usuarios, por ejemplo, a la hora de domiciliar nóminas o pagar impuestos.

Es en este contexto en el que nace la coalición de Accept my IBAN, que en la práctica funciona como una plataforma accesible en la que denunciar los casos de discriminación de IBAN, disponible para todos los ciudadanos de los países SEPA.

«Desde 2021, los consumidores han realizado 3.400 denuncias a través de la plataforma Accept my IBAN […]. Francia aún es el país más afectado (31 % de los casos), seguido de España (21 %) y Alemania (14 %). Este problema afecta a personas y empresas por igual; los servicios financieros y de telecomunicaciones son de hecho los mayores perpetradores.»

En otras palabras, el rol de Accept my IBAN es, por un lado, el de facilitar la denuncia de casos de discriminación IBAN a través de una plataforma de contacto sencilla y directa y, por el otro, el de presionar a las instituciones a actuar en consecuencia.

«Los resultados son compartidos con la Comisión Europea con regularidad, para dar a las autoridades una imagen completa de cómo, cuándo y dónde tiene lugar esta práctica ilegal.»

Imagen: Accept my IBAN

Formulario de denuncia de discriminación IBAN en Accept my IBAN

El formulario de denuncia de Accept my IBAN solo está disponible en inglés.

La discriminación de IBAN, hoy y mañana

En España, es fácil vaticinar que el problema de la discriminación de IBAN no se resolverá, al menos, mínimamente, hasta que las entidades públicas, que deberían servir de ejemplo para las privadas, dejen de hacerlo.

«Lo más preocupante es que, en algunos casos, un IBAN que comienza con las letras «equivocadas» puede impedir que los consumidores reciban devoluciones de impuestos, beneficios de desempleo y pagos de la seguridad social. Este problema también impide a las empresas escalar sus operaciones a lo largo de la UE, ya que no pueden pagar a sus proveedores o recibir pagos de sus clientes.»

La discriminación IBAN es más que un inconveniente, es un obstáculo que entorpece la prestación de servicios financieros y el crecimiento y la expansión de las empresas fintech en toda la Unión Europea.

Sin embargo, Magali nos asegura que «[…] las nuevas propuestas de Regulaciones de Servicios de Pago (ex. PSD2) que están siendo negociadas a nivel UE pueden proveer una oportunidad para, finalmente, poner un fin a la discriminación IBAN».

En efecto, su visión a futuro respecto a la discriminación de IBAN es positiva. Al preguntarle cómo podrían estas regulaciones ayudar a solucionar la problemática, Magali fue muy clara:

«[…] introduciendo reglas más estrictas contra la discriminación IBAN y empoderando a los reguladores para que hagan cumplir las reglas (incluso a través de sanciones).»

Finalmente, Magali nos recordó un punto importante en todo esto, y es que la mayoría de los consumidores ni siquiera están al tanto de qué es la discriminación de IBAN, ni mucho menos cómo denunciarla.

Se trata de una práctica tan común, que se la toma como algo normal, como una mera política interna de empresas, profesionales y entidades.

«[…] también necesitamos ayudar a que los consumidores conozcan sus derechos y en dónde presentar sus denuncias, razón por la cual la coalición de Accept my IBAN también está pidiendo a las autoridades la creación de un portal para toda la UE y la extensión de la prohibición a otras divisas europeas.»